Psicóloga Belén Yago
Psicóloga Belén Yago
Jul 16, 2018
Cada vez atiendo más casos de autolesiones y mis clientes se sorprenden porque les FELICITO. Es un recurso valioso del organismo que fue útil para sobrevivir. Tod@s l@s clientes (edad 22-50) me dicen la misma frase, “siempre lo he hecho” “no recuerdo cuando empecé”. Esto es debido al periodo en que el cerebro registro ese mecanismo como útil. Los avances científicos, lo establecen en los primeros años de vida, aunque suele dar la cara o se agrave en la adolescencia. En los primeros años de vida, la apertura emocional es máxima y no pasa por filtro de la lógica, todo es pura sensación. Con qué se aprendió: (no importa), pudo ser dándose un golpe al darse la vuelta en la cuna, porque se cayó al suelo o por una bofetada o de forma vicaria es decir o porque lo vio en otros. La tecnología y los avances científicos siempre imitan mecanismos de la naturaleza. Los desfibriladores, las inyecciones de epinefrina los zarandeos para despertar a alguien ¿no son golpetazos de vida? La autolesión es la bocanada de aire antes de morir asfixiado o ahogado. Esta bocanada es agresiva. Estos comportamientos, las autolesiones, no son una «abstracción» lógica, sino un esquema de acción práctica con contenidos diversos (motrices, emocionales, cognitivos) que quedan impresos en la organización y el funcionamiento del cerebro, y que la persona no puede variar de un día para otro, ya que, una vez internalizados, se activan de modo inconsciente. Pero en psicoterapia Si podemos
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